NO QUEDAN DÍAS DE VERANO
Qué canción más acertada he encontrado para describir mi situación. Échale un vistazo a la letra para saber a qué me refiero.
Reconozco que la incertidumbre del no saber NADA me acecha, me agobia y me bloquea. Sólo cinco minutos pido, sólo cinco, para explicar que no estoy detrás de ti durante un año por capricho y resulta que cuando por fin creo poder vivir la culminación del sueño, éste se desvanece de la noche a la mañana. Eso sí, el recuerdo que me queda es el mejor de los recuerdos posibles: un último beso que no quiere irse, una sonrisa cómplice, sincera, un abrazo que funde y libera los sentimientos enlatados horas antes.
Supongo que no quiero reconocer la dificultad que suponía el reto y sus consecuencias pero créeme que no me marco metas a un año de distancia sino fuera porque mi interés sobrepasa cualquier precio que debiera pagar. Y por eso en el fondo me tengo que sentir bien y estar contento por tenerte a un centímetro y haber disfrutado de ese momento.
Las noches veredianas me hicieron aflorar de nuevo ciertos sentimientos que tenía enterrados y por eso tengo que darte las gracias pero me gustaría dártelas en persona.
Gracias también a toda esa panda que hacéis posible que pueda expresar todo esto a través de vuestra página porque os aseguro que sí me ha servido de mucho.